lunes, 5 de abril de 2010

Lo nuestro tiene un poco de desquite

Ya que estamos en época pascual (sí se dice así? No sea que esté blasfemando…), quiero empezar este escrito con una profunda reflexión a la sociedad del mutuo elogio: cuál es la diferencia ente doxa y epistema?

Especulemos. Así como se podría pensar que hoy en día el capitalismo flexible es el responsable directo de nuestra palabra, de nuestra obra y de nuestra omisión, también sería justo decir que es él (Él) el que está matando al mundo. Silogismo simple; la doxa. Sin embargo, son las incoherencias de nuestros pensamientos las que están destruyéndolo; destruyéndonos.

Aunque afirmemos que somos concientes de que al planeta lo estamos arruinando, y que preocupadísimos digamos: “por qué no hacemos algo (tipo usar el transporte masivo por lo menos)????!!!!”, sabemos que terminamos de ver un documental triste y apocalíptico sobre la irreversible destrucción de nuestro hogar, de nuestra guarida y salimos a comer a Mc Donald’s. O sea, Mc Donald’s y el gran poder de la Corporación. Qué nos dice la epistemología? Yo diría que por fórmulas, cambiar la forma de comernos al mundo.

Ahora sí entendemos esa diferencia? (y el que la entienda, que me explique!)

Y entre otros caos, por eso me siento orgullosa de vivir en un país que otros consideran ‘en vía de desarrollo’, porque por lo menos no somos fuente de destrucción masiva como los que se jactan de pertenecer al flamante primer mundo y sus corporaciones. Sí, esos que nos niegan la visa para respirar su puerco aire! Y hablando de Colombia, me chinga que ahora todo se resuma en “coqueteos” y “guiños” y que encima de todo se tengan que encomillar. Pero estoy feliz porque la palabra “alianza”-también encomillada- está de moda!

Ahora, Mockus y Fajardo:
Bajo el lema popular ‘la unión hace la fuerza’ se recibe con bastante alegría –y sobre todo esperanza- lo que muchos –tal vez- estábamos esperando desde hacía bastante rato. Y no es una simple unión matemática sino de propuestas y de amor por Colombia, retomando lo que ya Colombia entera ha dicho, se trata de unir esfuerzos en función de la transformación del país, a cuestas de una renovación de la política.

Sí, yo también pienso que es una oportunidad histórica en un país que todo lo que tiene lo tiene CUESTIONADO, además de una manera de hacer justicia desprestigiada. Es una oportunidad sobre todo cuando cada quien se puso al país como le pareció: con nudo corbata, sobre el cuello, sobre los hombros, descaderado…

Cómo me dicen? Alicia –en el pays des merveilles, la de Lewis Caroll, ok?- que no sabe qué es latitud ni longitud pero las usa porque suenan bonito? Porque eso sí yo no me lo dejo quitar así pierda el semestre. Porque quién me va a dar de comer? Mi esposo, cierto?

“Agua, cerveza o Colombiana”, y yo le respondí al auditorio: “y la ‘Colombiana’ soy yo”.

En época de elecciones parlamentarias, un día estaba almorzando y le dije a la señorita que me estaba atendiendo que, por favor, me diera más ensalada porque yo no comía papa ni arepa ni esto ni lo otro... y el señor que estaba detrás de mí, me dijo –como si fuera la conclusión más obvia de todos los tiempos-: “Ah! es que es del Partido Verde”. O sea… cómo? Acaso los del Partido Verde sólo comen girasoles? De razón el otro está tan flaco!

Los quiere,
Ma. Clara Navia
By the way, lo más bonito que jamás me habían dicho (y eso que me lo dijo alguien que no me caía bien): “tenés nombre de periodista. [Pausa prolongada, y retomó:] ‘Informó, Ma. Clara Navia’”. Es necesario decir que ahora no me cae mal, verdad? Y bueno, ahora es mi mejor amiga! Jajajajajaja.
P.S.: Señor, perdóname porque no me gusta la investigación. Me gusta el chisme!
P.S².: Y... también perdóname por no querer ser su amiga por muy buena gente que sea! No es mi culpa (o si?) que me guste su novio!!!!

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