lunes, 25 de octubre de 2010
domingo, 24 de octubre de 2010
Round Here
"Would you catch me if I was falling?
Would you you kiss me if I was leaving?
Would you hold me ´cause I´m lonely... without you!"
Ella abajo, él arriba
Música de « extra » en RCN: Turu tu tu ru, tuturu tuturu (bis)
Presentadora en estudio: Muy buenas noches. Esta emisión la abrimos con una noticia de último minuto. Ella, -nuestra corresponsal- la protagonista, perdón, la narradora de la historia de la semana “Ella abajo, él arriba”, se encuentra río abajo disfrutando del saber poético y transformador de haberse ganado una mención especial en la categoría E-Teratura en el IX concurso Escritores Autónomos. Adelante Ma. Clara y felicitaciones.
Ma. Clara (con voz de noticia de aquí en adelante): Muy buenas noches a toda los televidentes que han seguido el desarrollo de “Ella abajo, él arriba” desde el comienzo. Así es, con ubicuidad, me encuentro… con Ubicuidad acá abajo, celebrando dicho… dicho… reconocimiento? Era justo el primero de la semana, después de los aplausos el martes pasado por “Ella abajo, él arriba”. En estos momentos estoy mirando al infinito a través de Ubicuidad con el sueño de una cultura libresca, cómo no? Con sueño, también. Sueño, la mejor amiga de Ubicuidad.
Como podemos ver a nuestro alrededor (cámara: paneo) este momento se toma la historia, porque implica la alternativa del mundo de tres dimensiones en uno de dos: la hoja, porque así es, como muy sabiamente aprendí ayer, dos puntos y abro comillas “el mundo existe para terminar en un bello libro” cierro comillas. Recordamos a los televidentes que los audios –tanto de la historia de “Ella abajo, él arriba”, y de todas las historias por venir, no los hemos capturado por respeto… a nosotros mismos.
Porque no hay memoria sin olvido, televidentes, y ese es el reto de una memoria sana: olvidar... y así ir hilvanando palabras sin hilo conductor y con aires maniqueos, olvidando
–a veces- que estuve, perdón, que ella estuvo abajo y él arriba. Por cierto, les recordamos a nuestra fiel teleaudiencia que nuestro valor del día es la rebeldía, y que cada poder trae consigo un contrapoder. Contrario a lo que muchos expertos dicen: “la vida no se trata de abrir la ventana y gritar”.
–a veces- que estuve, perdón, que ella estuvo abajo y él arriba. Por cierto, les recordamos a nuestra fiel teleaudiencia que nuestro valor del día es la rebeldía, y que cada poder trae consigo un contrapoder. Contrario a lo que muchos expertos dicen: “la vida no se trata de abrir la ventana y gritar”.
Presentadora en estudio: Gracias, Ma. Clara por la información, seguimos con otras noticias…en el estudio!!!!
Ma. Clara: No, no, no, no!! Ubicuidad y Sueño siguen con nosotros río abajo, y devotos televidentes, no sé por qué las palabras, conceptos y hasta los hombres raros me llaman la atención, me cautivan… será por eso que me excita que me hablen en inglés? Por qué mataron a Betty si era tan buena muchacha? Era buena muchacha Betty? No, era una mosquita muerta!!! Era una buena muchacha y una mosquita muerta, porque como aprendí hoy, dos puntos, abro comillas “No somos seres aislados, no somos esto cuando no somos lo otro”, cierro comillas. Así como no son dos mundos separados la técnica y la cultura, y que conviven en una relación epistémica y factual. Como ustedes y yo.
Queridos, es un hecho, así como el capitalismo no se boicotea dejando de ir a Mc Donald´s o de fumar Malboro, “Ella abajo, él arriba” seguirá siendo tema del día, de la semana, del mes. Quizás del año, hasta que ella esté arriba y él abajo. Y esto, esto será poco probable.
Y los dejamos con la frase tonta de la semana, tal como lo decía Gorgias en estos días, dos puntos, abro comillas “la cosmética, la culinaria y la retórica es el arte de la apariencia”, cierro comillas.
Ahora sí, lineal, instrumental, estática, y con una sobredosis de anfetaminas, informó: Ma. Clara Navia.
P.S.: Un homenaje a Carolina Ardila (La Presentadora en estudio)
viernes, 15 de octubre de 2010
Querido Etcétera
Querido Etcétera:
Lo admito, no fue amor a primera vista. ¡¡¡No lo fue!!! Sin embargo, no mucho tiempo después de haberlo conocido sucumbí a sus encantos. Creo que ninguna
–incluso ‘ninguno’- puede resistirse a usted, querido Etcétera; no sería sensato. Pero igual, ¿qué ha sido sensato estando a su lado? ¿Compartir las enumeraciones de amores, de mezquinas ilusiones o de cuentos de pasiones?
–incluso ‘ninguno’- puede resistirse a usted, querido Etcétera; no sería sensato. Pero igual, ¿qué ha sido sensato estando a su lado? ¿Compartir las enumeraciones de amores, de mezquinas ilusiones o de cuentos de pasiones?
No hace más de un mes me dieron la trágica noticia que hasta ahí llegaba con usted. Pero siento que no puedo dejarlo, que sigo siendo presa de sus caprichos –sin intensiones de refutarlos-, que usted se sigue inmiscuyendo en mis pensamientos y ultrajando mi boca, mis manos, mi tinta. Que sigo siendo tan suya como jamás lo he sido de nadie.
Tal vez usted se me haya convertido en un vicio y quizá por eso signifique un martirio querer dejarlo; querer dejar de usarlo. Pero más allá de extrañar ese placer infinito y escaso de tenerlo entre mis letras, voy a extrañarlo a usted, querido Etcétera. A usted por acompañarme; a usted por complacerme; a usted por cautivarme con su brillantez y su exquisita sencillez.
Porque los seres humanos somos animales de costumbres, apegos, dependencias, e incluso amores, querido Etcétera, no va a ser fácil salir adelante, sin usted. Habrá otros –OTROS-, mejores que usted, no lo dudo. Pero, hasta la fecha, ninguno como usted, y ninguna como yo cuando dispongo –a mi antojo- de usted.
Así es, querido Etcétera, ¡usted se va! La Real Academia de la Lengua decidió omitirlo de mi vida, y de la de miles que se jactan escribiendo sus tres letras una y otra vez. Vendrán otros -literalmente OTROS, entre otros-, menos etéreos, en su remplazo. Aún no me acostumbro a su ausencia y a veces me refugio en el goce de su abreviación. Lo extraño.
P.S.: Espero que se lo encuentren, generaciones después, en la mística, exótica y popular urna bicentenaria colombiana.
OJO:
“La expresión “etcétera” significa “las demás cosas”, “y otros”. No es correcto por tanto, aunque es muy corriente, cometer el barbarismo de escribir o decir “etc, etc, etc” o mejor “etcétera”. (Esta expresión “etc” ya no se utiliza y está eliminada [se supone] del diccionario de la real academia española)”.
Chisme extraído de: Material sobre verbos, palabras de enlaces, bibliografía, etc. 2004. Publicado por la UNIVERSIDAD CENTROCCIDENTAL LISANDRO ALVARADO DECANATO DE ADMINISTRACIÓN Y CONTADURÍA COORDINACIÓN DE PASANTÍAS.
viernes, 8 de octubre de 2010
Yo pa ti no estoy!
No era mi plan besarlo. No era mi plan estar ahí, tampoco; en un garaje, un parqueadero… ¡no sé! ¿A quién se le ocurre trabajar en un parqueadero? La mente es caprichosa, y a veces una sátrapa, quizás por eso me niego a dormir. Bueno, él me besó, yo me dejé (pensé: “¿por qué no?” Aunque obviamente despierta sé por qué no, ¿no?).
Este pequeño fragmento de “lo último en mi cabeza” para empezar con mis deep reflections. Carreta, camello, papaya… ¿acción, opinión, omisión? La semana pasada soñaba con ser REALMENTE rubia. Lo sé, tan improbable como pertenecer al PC3 (Partido Comunista Clandestino Colombiano), como pensar en alguien sin haberlo conocido, o como tener cara de llamarse TAL. No, no es un pensamiento empírico analítico, ni lógico matemático, es simplemente racional.
Tan racional como cuando nos cuestionamos sobre la comunidad (en sí / en soi), y sobre a qué responde un interés colectivo. Hace 15 días estuve en una mesa rectangular –más conocida como ‘mesa redonda’– y como por ocho días dejé de ser yo (sólo por ocho) y sentí que la realidad me tocaba con esta suma de verdades: “…la violencia urbana, pero ésta no tiene sangre”; “es una democracia de mentiras”; “el poder de la Corporación”; “no son los males violentos los que nos matan, sino los sordos, los tolerables”; “no existen héroes sino las circunstancias heroicas” (me dio duro esta revelación, lo confieso); “el problema de Colombia es que nada es serio”; “UNA SOCIEDAD QUE TIENE 50% DE POBRES, ES UNA SOCIEDAD QUE NO ES PRESENTABLE”!!!! Y esta última en mayúsculas porque se lo merece, hace 15 días era una frase completamente elitista, fascista… hoy me da mucha risa leerla; hoy cuando he vuelto a ser yo; así como ustedes cuando no hacen parte de una mesa rectangular.
El caso es que esta semana ha sido una ruptura (ésta, la pasada y la antepasada, de hecho). Es una realidad que ya no soy Directora E(ncargada) del Noticiero de La Llave (¡¡¡la Corte Constitucional debería tomarlo como ejemplo y elegir Fiscal!!!). Ahora soy una periodista rasa, fashion, pero rasa. Entonces, a raíz de esta coyuntura podríamos reflexionar por qué las interinidades afectan la democracia, pero como la ignorancia perpetúa la barbarie, dejémoslo en que ante todo somos seres humanos –sí, ¡la justificación de la maldad y la estupidez!–. Cruel, ¿verdad? Sí, entre otras cosas, no es fácil darse cuenta que al fin y al cabo uno es tan frágil como una democracia, y que, en mi caso, soy tan parecida a la llama (¿que llama?) de Chiclets Adams. Distorsionada. O distorsionadora, como más bien diría el psicólogo.
Pero el amor existe. No todo está perdido. El martes, a falta de las ex habituales citas, tuve un rendez-vous con Amparo Sinisterra de Carvajal (Directora de Proartes y de la emisora de la Fundación Carvajal, ¡ignorantes!), y después de escucharla hablar horas enteras dijo algo muy cierto: “si usted tiene juegos Fisher Price, no espere ser creativo. Es bueno ser pobre, uno se echa la bendición y “ahí voy””. Pero claro que omitió algo fundamental para la clave del éxito hoy en día (en los años 2000): ¡casarse con un Carvajal! Así que si alguien conoce al amor, díganle que no es grato en mi vida; la frase del comienzo era para cándidos como ustedes.
P.S.: “…si me condenas a perderte yo te condeno al pasado! Y el fantasma de mis besos vivirá siempre en tus labios”.
P.S.²: Alguno me quiere regalar un libro de cumpleaños (adelantado). Mi amor, tú?
P.S.³: Quién quiere ir al concierto de Ricardo Montaner conmigo?? Mi amor, tú?
Este pequeño fragmento de “lo último en mi cabeza” para empezar con mis deep reflections. Carreta, camello, papaya… ¿acción, opinión, omisión? La semana pasada soñaba con ser REALMENTE rubia. Lo sé, tan improbable como pertenecer al PC3 (Partido Comunista Clandestino Colombiano), como pensar en alguien sin haberlo conocido, o como tener cara de llamarse TAL. No, no es un pensamiento empírico analítico, ni lógico matemático, es simplemente racional.
Tan racional como cuando nos cuestionamos sobre la comunidad (en sí / en soi), y sobre a qué responde un interés colectivo. Hace 15 días estuve en una mesa rectangular –más conocida como ‘mesa redonda’– y como por ocho días dejé de ser yo (sólo por ocho) y sentí que la realidad me tocaba con esta suma de verdades: “…la violencia urbana, pero ésta no tiene sangre”; “es una democracia de mentiras”; “el poder de la Corporación”; “no son los males violentos los que nos matan, sino los sordos, los tolerables”; “no existen héroes sino las circunstancias heroicas” (me dio duro esta revelación, lo confieso); “el problema de Colombia es que nada es serio”; “UNA SOCIEDAD QUE TIENE 50% DE POBRES, ES UNA SOCIEDAD QUE NO ES PRESENTABLE”!!!! Y esta última en mayúsculas porque se lo merece, hace 15 días era una frase completamente elitista, fascista… hoy me da mucha risa leerla; hoy cuando he vuelto a ser yo; así como ustedes cuando no hacen parte de una mesa rectangular.
El caso es que esta semana ha sido una ruptura (ésta, la pasada y la antepasada, de hecho). Es una realidad que ya no soy Directora E(ncargada) del Noticiero de La Llave (¡¡¡la Corte Constitucional debería tomarlo como ejemplo y elegir Fiscal!!!). Ahora soy una periodista rasa, fashion, pero rasa. Entonces, a raíz de esta coyuntura podríamos reflexionar por qué las interinidades afectan la democracia, pero como la ignorancia perpetúa la barbarie, dejémoslo en que ante todo somos seres humanos –sí, ¡la justificación de la maldad y la estupidez!–. Cruel, ¿verdad? Sí, entre otras cosas, no es fácil darse cuenta que al fin y al cabo uno es tan frágil como una democracia, y que, en mi caso, soy tan parecida a la llama (¿que llama?) de Chiclets Adams. Distorsionada. O distorsionadora, como más bien diría el psicólogo.
Pero el amor existe. No todo está perdido. El martes, a falta de las ex habituales citas, tuve un rendez-vous con Amparo Sinisterra de Carvajal (Directora de Proartes y de la emisora de la Fundación Carvajal, ¡ignorantes!), y después de escucharla hablar horas enteras dijo algo muy cierto: “si usted tiene juegos Fisher Price, no espere ser creativo. Es bueno ser pobre, uno se echa la bendición y “ahí voy””. Pero claro que omitió algo fundamental para la clave del éxito hoy en día (en los años 2000): ¡casarse con un Carvajal! Así que si alguien conoce al amor, díganle que no es grato en mi vida; la frase del comienzo era para cándidos como ustedes.
P.S.: “…si me condenas a perderte yo te condeno al pasado! Y el fantasma de mis besos vivirá siempre en tus labios”.
P.S.²: Alguno me quiere regalar un libro de cumpleaños (adelantado). Mi amor, tú?
P.S.³: Quién quiere ir al concierto de Ricardo Montaner conmigo?? Mi amor, tú?
viernes, 24 de septiembre de 2010
“Rojas Pinilla fue un gran presidente"
“Rojas Pinilla fue un gran presidente,
no subió de manera democrática
pero el pueblo lo quería; y si no me creen,
pregúntenle a sus abuelos”.
no subió de manera democrática
pero el pueblo lo quería; y si no me creen,
pregúntenle a sus abuelos”.
(Rafael Álvarez, técnico de vuelo en el avión que trajo
a Rojas Pinilla a dar el golpe de Estado
del 13 de junio de 1953)
del 13 de junio de 1953)
Como lo pidieron, aquí les va: ampliación del texto:
“Rojas Pinilla. 1953-1957" http://lapavanavia.blogspot.com/2010/09/rojas-pinilla-1953-1957.html
¿Qué había antes del general Gustavo Rojas Pinilla? ¿Quién era Laureano Gómez? El presidente, y acerca de la democracia, Gómez rechazaba las libertades absolutas y el individualismo extremo. Él quería una demoGracia organizada en la doctrina católica, presidida por la justicia y bendecida por Dios. Su gobierno estaba fundamentado en “abatir” la crisis apocalíptica que azotaba el mundo: el marxismo. Pretendía imponer (dícese por la fuerza) un proyecto autoritario de poder con una Constitución que lo legitimara. Resultados: enfrentamiento entre el Estado y la sociedad, creación guerrillas liberales y paramilitares conservadores. Así nació La Violencia. Violencia que, por un cuarto de hora, el general destruyó; pero como acá a nadie le gusta nada…
Retomando: Entonces, después de que el 13 de junio de 1953, Colombia estuviera sin presidente desde las 10:00 a.m. hasta las 4:00 p.m., porque Laureano Gómez se voló quién sabe adónde, todo empezó con un “general, salve usted la Patria”. Y así fue (o, al menos, así creen muchos que fue. Mi papá es uno de ellos). Rojas, aplaudido por amplios sectores, representó la nueva independencia, el inicio del fin de la “horrible noche”, cuando “ante la tremenda crisis política del país, las Fuerzas Armadas de la República [determinaron] hacerse cargo del país”, de este trágico país.
Los objetivos eran sencillos –como siempre creen los presidentes que son–: la paz, la desmovilización, la rendición. Sin embargo, los resultado fueron complejos: un amplio plan de obras públicas y grandes reformas sociales como el derecho de voto a la mujer y la protección a la niñez; creó del Instituto Nacional de Abastecimiento, para la venta de productos subvencionados por el Gobierno; obligó a la radio a transmitir 25 % de música colombiana; creó el Banco Hipotecario Popular y el Banco Cafetero; y, por supuesto, su proyecto de mayor alcance: Sendas, con el cual su hija hizo lo que quiso. Sin embargo, la reforma tributaria, que afectaba la amada plusvalía de las empresas, trajo la oposición al Gobierno. Comentario mío: ¡¡¡oligarquía resentida!!!
Pero cabe resaltar que la oposición también surgió de los sectores del campo y de los sindicales por la prohibición de la actividad de comunismo internacional, es decir, la legalización del Partido Comunista en Colombia. No era para menos…, ¡prohibirla! Y fue así, entonces, como en respuesta a las acciones del general, los conservadores y los liberales formaron el “Frente Civil”, que lucharía por el retiro de Rojas.
No obtuvo apoyo político obrero, la violencia aumentaba, las acciones de las guerrillas comunistas no habían sido contrarrestadas, las Fuerzas Armadas estaban fraccionadas, había oposición de la Iglesia y de los partidos tradicionales; en estas instancias, ¿cómo mantener el Estado de Sitio? Imponer la censura de prensa, clausurar periódicos y castigar las represiones populares fueron una opción. Quizás no la mejor –evaluación a posteriori–.
Y lo tumbaron
“Rojas Pinilla. 1953-1957" http://lapavanavia.blogspot.com/2010/09/rojas-pinilla-1953-1957.html
¿Qué había antes del general Gustavo Rojas Pinilla? ¿Quién era Laureano Gómez? El presidente, y acerca de la democracia, Gómez rechazaba las libertades absolutas y el individualismo extremo. Él quería una demoGracia organizada en la doctrina católica, presidida por la justicia y bendecida por Dios. Su gobierno estaba fundamentado en “abatir” la crisis apocalíptica que azotaba el mundo: el marxismo. Pretendía imponer (dícese por la fuerza) un proyecto autoritario de poder con una Constitución que lo legitimara. Resultados: enfrentamiento entre el Estado y la sociedad, creación guerrillas liberales y paramilitares conservadores. Así nació La Violencia. Violencia que, por un cuarto de hora, el general destruyó; pero como acá a nadie le gusta nada…
Retomando: Entonces, después de que el 13 de junio de 1953, Colombia estuviera sin presidente desde las 10:00 a.m. hasta las 4:00 p.m., porque Laureano Gómez se voló quién sabe adónde, todo empezó con un “general, salve usted la Patria”. Y así fue (o, al menos, así creen muchos que fue. Mi papá es uno de ellos). Rojas, aplaudido por amplios sectores, representó la nueva independencia, el inicio del fin de la “horrible noche”, cuando “ante la tremenda crisis política del país, las Fuerzas Armadas de la República [determinaron] hacerse cargo del país”, de este trágico país.
Los objetivos eran sencillos –como siempre creen los presidentes que son–: la paz, la desmovilización, la rendición. Sin embargo, los resultado fueron complejos: un amplio plan de obras públicas y grandes reformas sociales como el derecho de voto a la mujer y la protección a la niñez; creó del Instituto Nacional de Abastecimiento, para la venta de productos subvencionados por el Gobierno; obligó a la radio a transmitir 25 % de música colombiana; creó el Banco Hipotecario Popular y el Banco Cafetero; y, por supuesto, su proyecto de mayor alcance: Sendas, con el cual su hija hizo lo que quiso. Sin embargo, la reforma tributaria, que afectaba la amada plusvalía de las empresas, trajo la oposición al Gobierno. Comentario mío: ¡¡¡oligarquía resentida!!!
Pero cabe resaltar que la oposición también surgió de los sectores del campo y de los sindicales por la prohibición de la actividad de comunismo internacional, es decir, la legalización del Partido Comunista en Colombia. No era para menos…, ¡prohibirla! Y fue así, entonces, como en respuesta a las acciones del general, los conservadores y los liberales formaron el “Frente Civil”, que lucharía por el retiro de Rojas.
No obtuvo apoyo político obrero, la violencia aumentaba, las acciones de las guerrillas comunistas no habían sido contrarrestadas, las Fuerzas Armadas estaban fraccionadas, había oposición de la Iglesia y de los partidos tradicionales; en estas instancias, ¿cómo mantener el Estado de Sitio? Imponer la censura de prensa, clausurar periódicos y castigar las represiones populares fueron una opción. Quizás no la mejor –evaluación a posteriori–.
Y lo tumbaron
En 1956, el país estaba de nuevo tan polarizado como tres años antes. Como una salida, el general proclamó su nuevo proyecto político, que buscaba la independencia de la estupidez (de hoy en día, incluso): La Tercera Fuerza. ¡Pero cómo se le ocurrió! Así, el Frente Civil optó definitivamente por el derrocamiento del régimen.
La declaración de Benidorm presionó con éxito a Rojas para que moderara su actitud, además para que “abdicara” y luego poder convocar a una Asamblea Nacional Constituyente.
El 6 de mayo comenzó una huelga general impulsada por el Frente Civil, a la que se le sumó la Andi, para paralizar económicamente al país y presionar la salida del general. Varios periódicos cesaron su circulación. Los estudiantes no volvieron a clases. Los bancos cerraron sus puertas. El transporte dejó de funcionar.
A quienes pusieron a Rojas en el poder les resultó más grande el caldo que los huevos. El general no les salió rentable: muchos adeptos, que canalizaron las inconformidades de las inútiles tradiciones bipartidistas. Lo tumbaron: ellos, los otros, estos, las señoras del Museo la Tertulia, o quienes fueran, ¡pero lo tumbaron!
El 10 de mayo de 1957, mi papá estaba en la escuela militar: "armados hasta la coronilla, preparados para defender al general Rojas Pinilla". María Eugenia (la hija del general) le dijo a su papá que para qué tenía las ametralladoras, pero él, sabiamente, le replicó: "Prefiero entregar el poder antes que se derrame una gota de sangre”. Comentario mío: Lovely! Finalmente no era tan “peligroso”, ¿verdad?
¿Y qué hay con la famosa explosión del 7 de Agosto de 1956?
La declaración de Benidorm presionó con éxito a Rojas para que moderara su actitud, además para que “abdicara” y luego poder convocar a una Asamblea Nacional Constituyente.
El 6 de mayo comenzó una huelga general impulsada por el Frente Civil, a la que se le sumó la Andi, para paralizar económicamente al país y presionar la salida del general. Varios periódicos cesaron su circulación. Los estudiantes no volvieron a clases. Los bancos cerraron sus puertas. El transporte dejó de funcionar.
A quienes pusieron a Rojas en el poder les resultó más grande el caldo que los huevos. El general no les salió rentable: muchos adeptos, que canalizaron las inconformidades de las inútiles tradiciones bipartidistas. Lo tumbaron: ellos, los otros, estos, las señoras del Museo la Tertulia, o quienes fueran, ¡pero lo tumbaron!
El 10 de mayo de 1957, mi papá estaba en la escuela militar: "armados hasta la coronilla, preparados para defender al general Rojas Pinilla". María Eugenia (la hija del general) le dijo a su papá que para qué tenía las ametralladoras, pero él, sabiamente, le replicó: "Prefiero entregar el poder antes que se derrame una gota de sangre”. Comentario mío: Lovely! Finalmente no era tan “peligroso”, ¿verdad?
¿Y qué hay con la famosa explosión del 7 de Agosto de 1956?
Elemental. La coyuntura hizo que esto tomara un tinte político. Mil versiones hay al respecto, pero a nadie se le ocurre la más sencilla. Además, porque ese mismo día se cumplía un año del cierre de El Tiempo.
Mi abuelo, coronel Navia Varona, era comandante del Batallón Pichincha. A las 12:40 de la noche lo llamó el oficial de servicio a su casa, el capitán Camargo: siete camiones que venían de Buenaventura con 1.053 cajas de dinamita e iban para Industria Militar en Bogotá tenían fallas mecánicas pedían permiso para quedarse en el batallón. Firme como todo militar, mi abuelo dijo que eso era imposible, que los mandaran para la PM (literalmente, la puta mierda). Pero el oficial entendió que para el Batallón de la PM, que funcionaba en el Batallón de Ferrocarrileros, en la carrera Primera con 25. Y allá fueron a dar los camiones a la madrugada. A la 1:07 a.m., por motivos que aún se desconocen, explotaron los camiones… y ocasionaron la llamada Explosión del 7 de Agosto..., e, infortunadamente, “limpiaron” una zona de tolerancia. Hubo más de 5.000 personas afectadas y muchas -MUCHAS- manzanas a la redonda desentejadas.
Entonces, evidentemente pudieron haber sido fallas técnicas, recalentamiento de los camiones, pero incluso el héroe de esta historia en su alocución dijo que podría haber sido obra de los expresidentes Alberto Lleras y Laureano Gómez, quienes cuatro días atrás habían publicado el acuerdo político firmado en España, conocido como Pacto de Benidorm, en el que a nombre de los dos partidos declaraban el gobierno militar de Rojas Pinilla como dictatorial e inconstitucional.
El fin
El caso es que el FIN lo marcó, nueve meses después, el supuesto camino de regreso a la normalidad democrática e institucional: la Junta Militar, y después el famoso Frente Nacional, que duró hasta los años setenta.
“Menos mal Rojas Pinilla se acabó”. Supuestamente, su derrocamiento dio paso a una nueva era de reconciliación política y paz doméstica, como dice David Brushnell, historiador estadounidense -sí, estadounidense, ¡así que qué va a saber de eso!-. Evidentemente, la Violencia había terminado, pero nuevas formas de violencia llegarían. ¿Para quedarse? No sé, hoy estamos ante la mutación de las causas del conflicto, por ejemplo.
Al mes siguiente de haber sido derrocado el general, mi abuelo empezó a rodar: de Comandante del Batallón Colombia pasó al Batallón Guardia Presidencial y luego al Comando Centro de infantería. En sus Memorias cuenta que "daba la impresión de que me iban corriendo poco a poco". Así, fue nombrado agregado militar, aéreo y naval ante la Embajada colombiana en Quito y uno día de esos de vida diplomática llegó el periódico El Tiempo con un nuevo decreto del Gobierno, mediante el cual se llamaba a calificar servicios a 18 oficiales, jefes grandes del Ejército. "Se nos consideraban peligrosos, éramos rojaspinillistas", relató mi abuelo, quien a pesar de los años (1987, cuando acabó sus Memorias) seguía sintiendo "lo amargo, lo infame, lo doloroso, lo planeado, lo político" de la noticia.
Bueno, y hay que agregar que a mi papá también lo jodieron. "Mi hijo Óscar se encontraba en la Escuela Militar de Cadetes cursando su segundo año. Vino la caída del Gobierno Militar y él fue azotado antes que yo lo fuera: se trataba del hijo de un peligroso".
Y es así como termina esta historia: en 1970 Misael Pastrana subió en medio de las acusaciones del M-19, Movimiento 19 de Abril -“con el pueblo, con las armas, al poder”-, que nació cuando se robaron las elecciones. Movimiento del que mi papá hizo parte, con el Comandante Papito, con Navarro Wolff, pero esta es otra historia.
P.S. (que nada que ver): Finalmente, todos los presidentes terminan teniendo problemas con los medios de comunicación, el problema no solo fue de Laureano Gómez o del mismo Rojas Pinilla… Ver también: “Otra pregunta, amigo” (mi video preferido).
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